V. R.C. |
Hombres de ciencia soviéticos han
descubierto millones de esqueletos de dinosaurios en una región muy apartada de
la Mongolia. La noticia es desconcertante, porque en el mundo había un par de
docenas de estos armazones de huesos, reunidos y cuidados con muchos
sacrificios personales y monetarios.
Después de este verdadero dumping
de esqueletos de dinosaurios con que nos amenazan los rusos – al igual que el
trigo hace algunos años – no podemos menos que pensar en la consecuencia que
tendrá el descubrimiento de tan enorme cantidad de huesos. Es evidente que hay
que desenterrarlos, pero con unas pocas palas mecánicas el problema será
resuelto. El cementerio dinosáurico está circunscrito según los cientistas
andariegos, a un antiguo lecho de río lo que hace suponer una costumbre igual
que la de los elefantes salvajes que eligen un sitio para morir.
El personaje puesto por Jenaro
Prieto en “Un muerto de mal criterio” habría sufrido una gran alegría al saber
de la huesera mongólica de reptiles. Hay ahora un stock para elegir toda clase
de huesos, sin necesidad de recurrir a la reconstrucción de la talla
dinosáurica con la ayuda del yeso. Los grandes esqueletos que se exhiben en los
museos – valuados enalzadas sumas – perderán ahora su valor ante la oferta de
huesos que surge desde la Mongolia. ¿Qué utilidad se dará a ese cementerio de
reptiles fósiles?
Los rusos están necesitados de
divisas, y con seguridad comenzarán a exportar la materia prima a destajo. El
hueso como abono es cosa admitida; como alimento para aves, también; la
fabricación de peinetas de hueso volverá por sus fueros, y hasta me atrevería a
pensar en la iniciación de una industria, para la exportación las substancias
rusas tan famosas como los pasteles de Tobolsk, que halagaron el paladar de un
Rasputín.
Otro aspecto del descubrimiento
de esqueletos de reptiles fósiles de las épocas jurásica y cretácea Inferior, es que la
abundancia va a producir la popularidad
de unos esqueletos que antes se
consideraban joyas por lo escasos. El hueso de dinosaurio se hará popular como
la marmolina, el carey y el nylon, pero no tan común como el hueso de gallina…
sobre todo entre nosotros, aunque se desee construir un matadero modelo para
aves…
Podríamos haber esperado del
Extremo Oriente un yacimiento de huesos de dragones, pero los estudios que se
han hecho dan por tierra con el emblema de los chinos. El dragón es de la
fantasía y de los trajes orientales. Posiblemente en la vida real tuvo su
equivalente en un pájaro grande antediluviano o un reptil alado, cuyos huesos
se perdieron.
Los fenómenos extraordinarios que
presentan a veces los reinos vegetal o animal tienen el privilegio de cautivar
la imaginación de los hombres. Y las excavaciones revelan cada día sorpresas
inauditas. ¿No es acaso desconcertante que al excavar tierras milenarias, para
sacar a luz la tumba de San Pedro, se
descubra, en cambio, la tumba de un pagano, con un despreciativo
epitafio para el Más Allá?
Los cientistas en la Mongolia
buscaban cierto mineral preciado hoy día en el mundo… y encontraron huesos,
montones de huesos de dinosaurios, cuya historia interesa a muy pocos, pero, su
aplicación, a muchos.
Recopilación por: Alejandro Glade
R. / Escrito por: Victoriano Reyes Covarrubias.
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